CAMBIAR DE ESPACIO
CAMBIAR
DE ESPACIO
“No temas, pues yo
estoy contigo, no mires con desconfianza, pues Yo soy tu Dios, y yo te doy
fuerzas, yo soy tu auxilio y con mi diestra victoriosa te sostiene.” Isaías 41:
10
Muchas personas se
cuestionan sobre la pertinencia de cambiar de espacio para mejorar su estado
emocional, para tener más paz o para cambiar algún comportamiento que les hace
daño.
En algunos casos es
impórtate cambiar de espacio, eso depende de la posibilidad económica que se
tenga para hacerlo, de la posibilidad de reanudar el proyecto de vida en otros
escenarios, de seguir luchando por los grandes sueños y metas.
Sin embargo siempre
resalto que la libertad debe acontecer primero en el interior, he conocido
muchas personas que se alejan de sus padres al descubrir que estos no les
permiten vivir sus propias vidas, pero igual los padres siguen haciendo
seguimiento a actividades tan intimas y elementales como ir al baño, comer u
orar por vía telefónica, llaman inclusive dos o más veces al día, entonces ahí
no existe ninguna independencia.
Cambiar de espacio en
muchas oportunidades no pasa de ser una manera estética de arreglar las cosas,
por fuera se ven bien las cosas pero al interior es una locura, he identificado
parejas separadas que viven a parte pero que siguen acosándose, celándose,
persiguiéndose, lastimándose, allí no hay cambios de fondo.
He encontrado a muchas
personas que afirman que dejaran las adicciones si sus familiares los llevan a
vivir a otros lugares y no pasa nado siguen en la adicción en otra parte, el
primer cambio debe partir del interior, lo exterior puede ayudar pero es
secundario.
Comentarios